Un juez condenó a Jesús Alberto Tovar Palomino a 20 años de cárcel tras un preacuerdo con la Fiscalía por ser responsable de tres asesinatos ocurridos entre el 1 y el 6 de abril de 2022 en el municipio de El Bagre, Bajo Cauca antioqueño. Entre las víctimas se encuentra Shelony Viloria, un miembro de la comunidad LGBTIQ+.
El asesinato de Shelony Viloria no solo dejó una huella en la comunidad LGBTIQ+ de El Bagre, sino que también resalta la importancia de proteger a las personas más vulnerables en la sociedad. La violencia y el odio hacia las comunidades marginalized todavía son una realidad en muchos lugares, y es necesario seguir luchando por la igualdad y la justicia para todas las personas.
Según el director Seccional de Fiscalías Antioquia, Daniel Parada Bermúdez, los crímenes fueron investigados por un fiscal de la seccional Antioquia y revelaron que fueron ordenados por el GAO Los Caparros y ejecutados por Jesús Alberto Tovar Palomino, quien era el encargado de cometer los homicidios selectivos dispuestos por la organización criminal.
Jesús Alberto Tovar Palomino se había fugado a la población de Magangué en el departamento de Bolívar, donde fue capturado. Sin embargo, a pesar de su fuga, aceptó su responsabilidad en los tres asesinatos y ahora enfrenta su condena de 20 años de cárcel.
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Cooperación interinstitucional y justicia efectiva por los asesinatos en El Bagre
Los expertos en seguridad y justicia han destacado la importancia de la cooperación interinstitucional para lograr la captura de Tovar Palomino y su posterior condena, ya que su detención y sentencia demuestran que no hay impunidad para aquellos que cometen crímenes graves, especialmente aquellos que atentan contra la vida y los derechos humanos de las personas.
La sentencia también es un mensaje importante para la comunidad LGBTIQ+, que ha sufrido una serie de violaciones a sus derechos en Colombia en los últimos años. Es fundamental que se respete la diversidad sexual y de género y que se tomen medidas para proteger a los integrantes de esta comunidad de la violencia y la discriminación.
La condena de Tovar Palomino es un paso importante hacia la construcción de un país más justo y seguro para todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género. Es necesario seguir trabajando juntos para garantizar un futuro libre de violencia y discriminación para todos.
En resumen, la cooperación interinstitucional y la justicia efectiva son fundamentales para lograr una sociedad más justa y segura para todos, especialmente para aquellos que son más vulnerables a la violencia y la discriminación. La sentencia de Tovar Palomino es un ejemplo de lo que se puede lograr cuando se trabaja juntos en un objetivo común, y es un mensaje de esperanza para aquellos que luchan por la justicia y la igualdad.
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